La filosofía de Pablo Chirivella se centra en “la búsqueda del origen”.
Profundamente arraigado a su tierra, el recetario tradicional valenciano constituye la base de su cocina que se amplia con productos, recuerdos y experiencias de su viaje. Un viaje de inspiración a lo largo de los años:
comenzó a cocinar en Valencia, después se trasladó a China, más tarde a Inglaterra, continuó formándose en el País Vasco, luego en Tenerife y finalmente, durante tres años, recorrió México de norte a sur. Después de abrir su maleta y llenarla de sabores y culturas, vuelve a su origen, a Valencia, para volver a comenzar en Tavella.
Tavella es el proyecto madurado de Pablo Chirivella, en el que invita al cliente a sumergirse, con los cinco sentidos, en cada uno de sus recuerdos.
El restaurante se sitúa en la casa familiar, una alquería centenaria que desde final del siglo XIX hasta mediados del XX estuvo destinada a la agricultura; más tarde albergó una boutique de moda y ahora se reconvierte en un espacio volcado a la exploración de las raíces, a la cocina con tradición sobre la que vierte creatividad y experiencias.
El respeto máximo hacía el entorno, el producto local de calidad y la cultura gastronómica son las bases irrenunciables de una cocina que se presenta como cultural, sólida e identitaria.
Y de ese origen en la leña, en la huerta y en el mar nace: Tavella.
“Volver al origen, que es dónde todo empieza, para volver a empezar de nuevo”.
Pablo Chirivella.